viernes, 19 de noviembre de 2010

Gente corriente



Somos la vida escrita en las paredes, nos tachan de rebeldes. Somos culpables de ser inocentes, tozudos e inconscientes.

--------------------

Si te detienes justo en medio de una calle muy concurrida y cierras los ojos, sientes a tu alrededor los corazones latiendo a cada paso.
No saben caminar sin prisas, ni amar sin mentiras. Son autosuficientes y emocionalmente dependientes. Crecen y se reproducen y aún así se sienten incompletos. Siguen caminando pero nunca dejan de mirar atrás. Se parten el alma por recrearse en una vida que carece de todo fin humano y existencial, es pura inercia, se contentan con eso. No admiten secretos pero no dejan de crearlos. Hacen un sin fin de preguntas y de casi nada obtienen respuesta. No cesan ni un segundo de cuestionarse la razón de su existencia pero no le encuentran sentido alguno a dichas cuestiones. Aseguran ser felices pero no reconocen la felicidad cuando se presenta. Aseguran no estar tristes, pero lloran contra la almohada. Afirman ser los amos del universo, aunque sus capacidades sean tan insignificantes como su orgullo y su humanidad tan absurda como su ego.
Capaces, ineptos, apasionados, empáticos, apáticos, cariñosos, despiadados, humildes, sensatos, odiosos, soberbios, descarados, tímidos, pudorosos, impulsivos, insensatos, inteligentes, altaneros, ambiciosos, hostiles, sumisos, impetuosos, metódicos, tercos, avariciosos, mentirosos, sinceros, enamoradizos, libertinos....Tan corrientes.

--------------------

Somos las almas que entre sí conversan bajo una piel diversa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario