domingo, 4 de septiembre de 2011

La vida ya es otra cosa




Voy a hablarte de todo lo que pesa, de todo lo que duele. Será mejor que no me preguntes, porque son muchas las ideas y todas se amontonan en mi mente, y si trato de pensar en todas y cada una de ellas a la vez, me cuesta respirar, el aire se convierte en ceniza y me aniquila los pulmones.
Voy a hablarte de la importancia del amor propio. Será mejor que escuches bien y prestes atención a mis palabras, porque cuando quieras darte cuenta de todo lo que puedes abandonarte a ti mismo será demasiado tarde, y te habrás perdido por completo.
Voy a hablarte de la humildad y la arrogancia, y de su perfecto equilibrio. Será mejor que no me tomes en serio, porque aún no he conseguido dominarlas y el aprendizaje de dicha dominación lleva toda una vida de errores consigo.
Voy a hablarte del destino y de las casualidades. Será mejor que dejes las letras a un lado y empieces a creer en el azar, considerado una pauta en matemáticas y una coincidencia más en la vida real.
Voy a hablarte del sexo. Será mejor que te desnudes y lo experimentes sin más, ya que no hay reglas, ni criterios, ni siquiera un guión para interpretar. Tan sólo se basa en lo más primario, el instinto.
Voy a hablarte de la verdad y la mentira. Será mejor que no creas nada de lo que digo, pues puedo falsear mis propios pensamientos y hacerlos palabras con un léxico totalmente equivocado, y perder toda veracidad y ánimo de docencia.
Voy a hablarte del amor. Será mejor que dejes que te golpee, te arrastre, te sepulte y te deshaga, o de lo contrario te verás condenado al desastre de un vacío existencial que ni siquiera tú podrás arreglar. Duele, no voy a negártelo. Escuece. Pero también alimenta, ensordece y mantiene vivo el corazón.
Voy a hablarte de la vida... La vida... Ya es otra cosa.

Sobre la ausencia




La impasible necesidad de quien espera se demora en cada entrada y salida de aire, se consume en el interior y, una vez fuera, se hace eterna a los ojos de la inmensidad.
La suculenta pesadez de quien hace esperar se hace leve en el tiempo e insoportable en el espacio ajeno, arrebatando toda esperanza de conclusión moral. 
Las decisiones inmediatas de un enamorado se deslizan suavemente desde arriba, desde lo más foráneo e imprevisible e irremediablemente acaban cayendo sobre el suelo con una atroz fuerza motriz. 
El perceptible paso del tiempo que declara la distancia entre dos almas hace de sí mismo un obstáculo insalvable que arremete contra toda benevolencia de corazones que la salvan. Y es inevitable, es externo a la propia voluntad, sofocante, plagado de ansia, agonía y deseo.
No existe absolutamente nada más allá de la piel que no acabe con los sueños, y si existe, querida alma inquieta, no podrás verlo. Y es inevitable, es externo a tu consentimiento, incontrolable, plagado de insufrible impotencia e incesante recelo. 
Sobre la ausencia no diré nada, ya se ha escrito demasiado. Se ha proclamado con creces su astuta y desafiante indulgencia y se han hecho versos al destino y al amor ausente. Del amor ausente no diré nada, ya he tenido demasiado. No obstante, se me antoja necesario y, tal vez vanidoso, confesar que alimenta el desafío. Atenta contra la estabilidad emocional, definiéndose provisional en todo momento. Sí, es cierto. Sin embargo, no hay nada que no lo sea. Más lejos o más cerca, en cualquier sentido, hay cosas que no se pueden salvar. Pero este delirio aburrido de tregua efímera y pasajera, que desaparece y hace larga la espera, es salvable en todas las condiciones y ángulos posibles. Es tenaz y demostrable. Es verídico. Es sublime. Es total. 

martes, 2 de agosto de 2011

Nostalgia infinita



-Pero... ¿Sabes por qué no encontramos a la persona perfecta? Porque no somos estúpidos. Vivimos bajo la opresión de un criterio irrevocable e impersonal que no da tregua a nuestros instintos más físicos. A veces desearía ser un idiota, y conformarme, doblegarme y someterme al primer cuerpo que me dé calor, y de ese modo, sería capaz incluso de exigir, de acrecentarme y volverme un insolente arrogante con el único objetivo de satisfacer la necesidad más primaria. Por desgracia, en un instante vuelvo a mi presente y me percato de cuánto he sufrido sintiéndome solo, vacío, desamparado; cuánto sufro, cuánto me queda aún. No es posible garantizarle al espíritu la estabilidad de una vida amorosa, ni del sexo más placentero, o el frustrado, o el sórdido y fugaz, o el acostumbrado a horarios intempestivos.
-Creo que tienes toda la razón. ¿Sabes? A veces me sumerjo en estados de profunda tristeza y melancolía, y lo más dramático de todo es que no sé cuándo voy a salir de dicho estado. He de admitirlo: realmente sólo soy feliz cuando tengo a alguien a quien amar-, dijo él girando levemente el volante del coche justo cuando se disponía a entrar en la autopista.
-Cuando tienes alguien a quien amar, cuando te sientes amado, cuando todo pierde su razón de ser lógica, te abandonas a un mundo paralelo, pierdes la cabeza... Es... Es sorprendente lo que un vínculo emocional con otra persona puede provocar en nuestro sistema, empiezas a asimilar cosas que antes no eras capaz de ver, la predisposición te invade de repente y, cuando menos te lo esperas, sientes que la otra persona es el ser más maravilloso del mundo. Sólo basta una mirada, un segundo, y lo sabes, y te mueres de ganas por decírselo al mundo. Lamentablemente, los "te quieros" acaban teniendo espinas, espinas que ya no soy capaz de digerir-, respondí agachando la mirada, dejándose invadir por sus propias palabras.
Llegué a mi destino con la escasa esperanza de que sucediera algo que cambiara el curso de los acontecimientos. De repente, giró la llave y el coche se detuvo justo en el sitio donde debía hacerlo. Ni siquiera pude darme cuenta hasta unos segundos más tarde. Comencé a reírme, una risa floja e idiota bañada de nerviosismo y puro terror. "¿Por qué te ríes?", preguntó, como si deseara robarme un pensamiento y violar mi estrecha lógica irracional justo en aquel instante.
La conversación se volvió trascendente e irremediablemente sincera. Una lágrima comenzó a caer por su mejilla y fue entonces cuando supe que no era tan sólo una bonita fachada, había mucho más, algo más profundo y sofisticado de lo que hubiera podido imaginar. Le pedí un abrazo, ambos lo necesitábamos. Creí que justo después nuestras miradas se cruzarían en el espacio y mataríamos la tensión sexual que existía entre ambos con un dulce beso. No sucedió así.
Continuamos charlando, y el abrazo volvió a ser rescatado minutos más tarde con la intención de que nuestros cuerpos se conocieran mejor, se adivinaran el uno al otro y se regocijaran en la tristeza que les dominaba. El beso vino después. Ni siquiera lo consideré un beso, sino más bien un precipitado intento por hablar sin usar las palabras. Nuestros labios se rozaron sutilmente, muy despacio.
"En un beso sabrás todo lo que he callado", me dijo justo después. Quise recordar ese momento para siempre, sin excepción. Quise involucrarme de forma absurda y precipitada, quise ser otra persona, quise vivirlo intensamente. Si hubiera sabido entonces que dicho momento sería único, probablemente aún seguiría pegado al asiento delantero del coche olvidándome de mi miserable existencia y adentrándome en la amargura de lo efímero.
... Casi un año después sigo recordando aquella noche y humedeciendo mi raciocinio con nostalgia infinita.

Isn't it great?



I leaned back and sighed, my eyes were full of shy tears which were not still ready to be shed. I could not stop staring at him, admiring every pore of his beautiful skin. He did not even noticed, he just spent a second trying to feel more comfortable on that couch that had seen us wearing the passion down, tiring our bodies out, consuming our breaths with kisses i did not want to finish.
He was just kidding, trying to draw one more smile on my face. I was just doing my best to immortalize that beautiful moment, not a kind of special, but a kind of meaningful. I was not able to do it though. I could not. He was switching his voice off when he decided to turn sweet and nostalgic (he always show a tiny and charming voice), and, in a moment, looked even more beautiful, so much so that i could not help falling in love with him.
And there is something in the way, i mean, in the way he stares at you that you cannot focus on anything else, it is almost impossible. But at the same time, that sort of intriguing, scheming and mysterious look makes you wonder what he is thinking about, and just a couple of minutes later, he tells you: "you look handsome today, and i just want to be by your side, right here, right now. I would want you to fuss over me". Isn't it awesome? The fact that someone can feel something like that just seeing you, breathing the rest of the essence he can grab inside from the last time you saw each other. Isn't it great?

It is... It is fantastic. It is still chilling my bones.

Not a beautiful day


Someone once told me that sometimes it is impossible to face obstacles and handicaps and you just have to accept it, deal with it as good as possible and move on. Today, i feel blue, as if the rest of the world was shining, tearing me apart. Today is one of those days in which you got a feeling of loneliness and just need someone out there to hold you without asking anything at all. Today is a moment in which there is no sense of future but past, shaking all the memories, blowing your mind. When it comes to this, i do not know exactly what to do, nor how to react; the only thing i know is that i just got to go through it and be braver than the previous time. It is curious the fact of mentioning time: i have been fighting against it so many years. If there is an antagonist who is worth to fight against is it... Time. It keeps on moving, leaving behind all the moments, all the faces, all the nights and shots. Nobody can catch it and make it go slow, have you ever tried? I have not. Today is one of that days in which i am scared because of time. I am terrified. Somehow i just find the patience and reckless courage inside to not waste my time, but sometimes it is unfit, just another useless attempt to see stuff more clearly. What if someone just wakes up such an ordinary morning and realizes that his life has been totally wasted? What if the only thing you need is to take a look around you? Some time ago, i just started to feel so much better, started to hear my sound and stand on my own two feet, on a solid ground, and i would even lie if i said that i did not pretend to be like that. But, suddenly, i could bump into some stuff that made me feel alive again, made me have a reason to get up every morning and keep on growing up, made me feel happier and appreciated. But not today. Today is a day in which happiness is over and this sparkling sun is defining my sense of freezing. Today is that day in which i do not care about other people complaints, i just do not want to see them yelling and arguing about stupid or important things, that does not seem relevant to me, not today. Today i just want to cry, to flood my pillow with tears i cannot shed anymore and let this sadness melt away among my hours. Today i just look forward not to be myself, to play an overrated role in this fake society of forced smiles. Today i just need to let some seconds slip in order to lose myself in a jungle of grotesque thoughts. Today is one of the days in which you cannot breathe in, nor breathe out, and the spit becomes stoning in your mouth. Today i have nothing at all in my pocket, nothing at all in my brain. Today there is much fun outside to take, and many plans to do, things to say and jokes to make. Today is not a beautiful day, but today is just a day... Tomorrow is coming.

jueves, 14 de julio de 2011

Confessions of an ordinary guy



-Okay, man. You wanna be queer? You choose, it's totally up to you. But you gotta know that not everybody is as tolerant as me. People are cruel, unfair. They show no human beingness and they don't even care about it. You're gonna be pushed, hit and underappreciated, lashed. You're not gonna be able to face it. I'm so sorry boy, but when someone just shows himself up and try to feel comfortable with the person he thinks he is, the current society deals with the possibility of turning your illusions off and break your human point of view. There's nothing personal in it, it's just its way of proceeding, and you can't do anything about it.
Sometimes you're gonna find yourself surprised in a situation in which they look at you with eyes full of humanity and respect, not always works like that tho'. And i know, i know, i know... You think you're such a good guy, and sometimes just can't seize the day because of wondering why human beings can be so hard to themselves, and suddenly, all your faith in your kind is broken. You can't fix it. It's then when you gotta make a choice: keep on being yourself or just dress your values up in order to feel accepted, as everyone else. But trust me, it doesn't take you anywhere. There'll be one day, no matter which one, nor when, nor how long it takes until you can see it, but that day, only that day, you'll realize that if you go out of your house with your head up, just being proud of who you are, there's no need of proving anything at all, you don't have to. So, then, and only then, you'll be conscious about how easy is everything else if you take it that way. And then, only then, you feel like anything is possible and you are deserving of love too.

-I'm not gay, dude.

-But i am.

miércoles, 29 de junio de 2011

Detener el tiempo

-¿Sabes? Llevo algún tiempo preguntándome si hemos dejado de disfrutar el uno del otro. 



-Hoy no creo que pueda siquiera pensar en eso, estoy agotado, mentalmente agotado de intentar demostrar a cada segundo todo lo que significas para mí. 

-Entonces, ¿por qué ya no me miras?

-Porque te quiero, porque me araña por dentro cuando pienso en lo esencial que eres para mí, en como me gustaría pasar una noche entera acariciándote, besándote y haciéndote el amor hasta saciar esta sed que tengo. Como deseo vestir tu piel de elogios y contemplarte cuando duermes, admirarte, detener ese momento y no cansarme jamás. Sentir tus manos sobre mi pecho, escuchar cada gemido, amarte una vez más y volver a empezar, dejar de ser yo mismo y pasar a formar parte de tu espíritu, volver en mí y enamorarme de ti.

-¿Por qué me quieres?

-No lo sé. Hace tiempo que dejé de buscar razones para quererte, simplemente te quiero. ¿No lo captas? Todos mis pensamientos giran en torno a ti: cuando iluminas la habitación con una sonrisa, cuando dejas que una triste lágrima brille en tus ojos y se derrame por tu mejilla cuando algo te importa de verdad, cuando te vuelves completamente loco y eres espontáneo, cuando te preocupas y dejas ver un atisbo de soledad en tu mirada, cuando haces el tonto sólo para verme reír, cuando descubres lo atractivo que eres y lo proyectas en mí, cuando me abrazas (lo que daría por eternizar esos abrazos), cuando revolucionas cada plan interno que previamente había diseñado, cuando dejas los pudores a un lado de la cama y me haces el amor en el otro lado, cuando me desnudas sin tocarme, cuando me rompes los esquemas con un gesto inesperado, cuando me haces sentir especial y afortunado tan sólo estando a mi lado, cuando eres tan tú que hasta te duele...

-...¿Qué hacemos?

-¿Qué quieres hacer?

-Detener este momento... 

-Ven aquí.

viernes, 15 de abril de 2011

A lo que está por venir....



De pie, frente al inmenso azul, como si no existiera nada más que un océano infinito. Cerré los ojos y aspiré el dulce olor que trae consigo la sal, bailando los dedos de los pies con la arena fría, dibujando caminos de zig zag que no iban a ninguna parte. La marea estaba alta aquella mañana y aún así sobraban kilómetros de experiencias arenosas que terminaban a primera hora del día y empezaban de nuevo horas más tarde, apresurándose por ser únicas. No se escuchaba absolutamente nada, sólo el mar, la melodiosa sensación de calma y tranquilidad, la quietud que tanto anhelaba, la paz interior de los días más caóticos.
Pude sentir el aroma del café en la cocina de una casa rebosante de alegría. Venía caminando con la taza humeante en la mano, a cámara lenta, vaticinando muestras de cariño, podía adivinar su mirada en la lejanía y conocía su caminar a la perfección. El verde agua transparente que vertían sus ojos me recordaba al mar, me calmaba, me daba paz. Me dio un sorbo de café y un beso en la frente, -¡buenos días!-, dijo, y me sonrió como si guardara un secreto. No dejaba de adularme con esa sonrisa y no me cansaba de admirarlo, sin pudores, era todo lo que necesitaba por el momento. Me di la vuelta y me abrazó, estrechándome entres sus brazos...Recuerdo que pensé "si este es el comienzo de la felicidad, tal vez nunca pueda dejar de ser feliz).

--------------------------------------------------------

Al que estè per venir, a l'illa que em acollirà

jueves, 14 de abril de 2011

SI/NO

SI

-La sonrisa de un niño.
-La música en directo.
-Las sábanas limpias y frías.
-Los impulsos incontrolados.
-Los encuentros a deshora, los mejores.
-Las conversaciones eternas.
-Soñar despierto.
-Romper pautas.
-Filosofar.
-La trascendentalidad.
-La primavera.
-El mar, y su brisa latigando mi cara.
-Llorar riendo.
-Los animales.
-Las verdades incómodas.
-La humanidad más absoluta.
-La lluvia sobre mi cuerpo.
-Andar descalzo.
-Lo que nadie dice/hace.
-Bailar.
-Estirarme.
-La espontaneidad.
-La sinceridad.
-Lo primario, el instinto.
-La pasión desenfrenada.
-Los arrebatos.
-Sonreír por dentro.
-Vivir intensamente.
-Arriesgarse.
-La lealtad.
-Los idiomas.
-Viajar, el mundo entero.
-Los abrazos, las caricias.
-El sexo.
-El amor.


NO

-Ver llorar a alguien.
-El tráfico en hora punta.
-Los desengaños.
-La decepción.
-Las reglas.
-La hipocresía.
-La violencia.
-El dinero.
-El materialismo.
-Las enfermedades.
-La traición.
-Los insectos.
-La gente despreocupada.
-El pasotismo.
-La crueldad.
-El sin sentido.
-Los pies mojados.
-El insomnio.
-El invierno.
-Los cumpleaños.
-Los grandes eventos.
-La guerra.
-Las amenazas.
-Los plazos límites.
-La intranquilidad.
-La ausencia.
-El cansancio.
-La vanidad.
-La autocompasión.
-La condescendencia.
-La religión.
-El miedo.

lunes, 11 de abril de 2011

Ilusionarme otra vez....



"No más errores", me dije. No más intentos de darme por completo a cada minuto para después sentir el vacío sentencioso, ese que te juzga y te araña desde dentro, que hace añicos la persistente e inagotable necesidad de acabar con todo lo dañino y pernicioso.
¿Cuántos más fracasos y decepciones podría soportar? Ni siquiera me atrevía a pensar en ello. Dejé que el tiempo me asfixiara y se volviera espeso y perenne ante mis ojos. A mi forma de ver la vida, era sólo un desencadenante más.
Esperé a que llegara el cambio de estación, a que cayeran las hojas, y volvieran a nacer, y oliera distinto, y el sol quemara hasta atravesarme. Esperé a que se apagaran los rescoldos de un fuego sin lumbre. Esperé a que anocheciera, y que amaneciera después, y tras él, el atardecer; y tras él, la desgarradora angustia. Esperé a que todo cambiara de color, a quitarme las legañas que no me dejaban abrir completamente los ojos, alzar la vista al frente y divisar el horizonte. Esperé a que dejase de escocer y el dolor cesase. Esperé...Y esperé...Y esperé. Ahora ya no quiero esperar más. Sólo quiero preocuparme de no preocuparme, aceptar que la pausa es parte del camino, que el miedo es parte de mi humanidad y que el amor auténtico y venidero hará de mí lo que no soy ahora.
Ya no quiero debatir conmigo mismo las posibilidades. Ni tentar a la suerte cometiendo locuras de adolescente que tal vez me hagan arrepentirme después, ni probar mis instintos haciendo de ello una dura competición contra mi raciocinio. No necesito más drama, ni la amargura de lo efímero, ni la espera eterna de una mentira inevitable. No necesito más misterio, ni más indecisiones.
No me nace ser cruel ni tampoco deshonesto, pero estoy aprendiendo a respetarme, a convivir conmigo, a dialogar y a respirar tranquilo si algo no sale bien, a derrapar, a morder el asfalto y a seguir respirando.
No me nace no ilusionarme, pues forma parte de lo que soy. Y, he de confesar, que por cosas como estas, realmente merece la pena.

sábado, 26 de marzo de 2011

Reinas



No sabía como entrar en calor bajo la lluvia de focos, ni tampoco cuanto tiempo aguantaría allí, lo único que tenía claro era que necesitaba sentirse vivo. Se paseaba con aire tímido entre los cuerpos, sin ánimo de mirarlos, o tal vez sí, llegados a dicho punto ni siquiera él lo sabía. La multitud se agolpaba y resultaba casi imposible divisar miradas más allá de lo inmediato, aunque tampoco había mucho que divisar, básicamente la sala estaba llena de Narcisos exhibicionistas que probablemente no sabían distinguir entre una conversación y un cuestionario. Nadie hacía ningún movimiento. Todos miraban, dando perspectiva a su caza furtiva. No estaba en condiciones de juzgar si aquello era un hombre o una mujer, pero pudo comprobar las dotes artísticas de semejante ser, a pesar de que hubiera preferido no hacerlo. La música se volvió estridente y sórdidamente lasciva. Todo estaba permitido, incluso la música.
Pasaron las horas y el hielo de la copa se estaba consumiendo, al igual que sus expectativas.  El baño parecía un desfile de gallinas obscenas que no conocían el precio de la integridad.
Decidió que ya estaba lo suficientemente borracho como para ridiculizarse a sí mismo, y tal vez, ganar la simpatía de alguien que no tuviera concepción de lo ridículo. De repente, un "hola" lo paralizó in situ y, tras mirar a su izquierda, conoció inmediatamente al dueño de dicha palabra. -Por un instante la noche se ha vuelto normal-, pensó en voz alta....

jueves, 24 de marzo de 2011

Decisiones



Si cierras los ojos y buscas en tu interior la inmensidad que no se escucha desde fuera, la sientes, te impregnas de ella, podrás ver todo el universo.

--------------------------------------------

Dejaré de preguntar por qué si tú me escuchas esta vez, si entiendes que no sé estar aquí ni en ninguna otra parte, que he participado de forma activa en cada instante de mi vida y, después de todo, sigo sin verme en ella.
Dejaré de reprocharte lo que no fue si me consuelas. Miénteme. Dime que todo está bien aunque realmente no sea así, que estos años han sido los mejores y que hoy por hoy no hay nada más que aportar. Que no se pueden inventar razones que endulcen lo amargo ni procesar situaciones que amarguen continuamente la naturalidad de los actos.
Dejaré de callar lo que siento si me abrazas esta noche, si vuelves a hacer que se me acelere el pulso. Necesito que lo digas, que lo hagas plausible, que desgarres cada porción de dolor que desgasta las esquinas de mi cuerpo.
Dejaré de pensar en lo abstracto si tú me hablas de cosas concretas: de lo preciosos que son esos lirios junto a la ventana, de lo inmensamente feliz que parezco aunque no sea cierto, de como has intentado por todos los medios hacer que me aferre a la posibilidad de seguir aquí, de como me has dado la oportunidad de ser sincero conmigo mismo, de lo que no quieres decir por miedo a que me desvanezca, de lo que no voy a decir por miedo a que te derrumbes y sueltes mi mano.
Dejaré de preguntar cuándo si te quedas aquí conmigo hasta el final, así no tendré que contar las horas y ellos no tendrán que rezar para que no ocurra. Todos nosotros estamos aquí implorando, esperando que venga algo ¿de dónde? A rescatarnos, a liberarnos, a hacernos fuerte.
Dejaré de atentar contra tu ingenuidad si me hablas claro y reconoces que has estado viviendo por mí y para mí, que te has olvidado de ti y de todo tu mundo y que has vendido tu integridad para salvar un alma ajena.
Dejaré de agradecértelo si dejas de decirme que no es necesario, que no hay nada que admirar y mucho que reconocer, que altruístamente decidiste estar aquí y que soy una marioneta en manos del tiempo.
Dejaré de llorar si no vuelves a culpar al destino.
Desconéctalo ya.

----------------------------------------------------------

Cuando todo se vuelve oscuro, ves un destello luminoso que no deja de moverse si lo sigues con los párpados. Tras varios segundos, desaparece.

miércoles, 16 de febrero de 2011

Excelentísimo Señor Presidente



Excelentísimo Señor Presidente,

Tras una incesante serie de crueles acontecimientos y situaciones que desmaquillan la capacidad innata del ser humano para cometer barbaries, le hago partícipe de la unanimidad de esta decisión, concebida, gestada y madurada en esta mente joven y emprendedora a juicio del criterio estudiantil, con la más absoluta de las simplezas y la más arrolladora de las razones, de que no existe ni nunca existirá una doctrina impuesta por "los de arriba" que determine la libertad de opinión y la rebelde moralidad de los que caminan a pie, y que, a su vez, se haga férreo el deseo de verse cumplida dicha doctrina a pesar de su escasa efectividad en este presente y en un futuro próximo. Asimismo, le adjunto una serie de nociones básicas para que dicha doctrina sea abolida. Hágase saber:

-Que no concierne a su voz, si no a nuestras opiniones.
-Que cualquier argumento, por simple que sea, creado bajo el consentimiento de una minoría capitalista, carece de todo valor moral, ético y humano tras sus propias cláusulas.
-Que el capital no es un bien ajeno a los problemas nefastamente resueltos de este nuestro país.
-Que el patriotismo funda naciones, no nacionalistas.
-Que la publicidad exhibicionista como arma de destrucción masiva queda obsoleta frente a la fuerte unión de las masas.
-Que no todo puede comprarse y sí todo puede ponerse en venta.
-Que usted juró defender los intereses de los que, tal día como hoy, decidieron, con criterio propio y absoluto, conferirle el poder de liderar la nación.
-Que las casualidades no son productos de las frías decisiones.
-Que el tiempo juega en contra de los que luchan a capa y espada por hacerse un hueco en una sociedad que promete la gloria y cubre con ésta sus errores.
-Que las televisivas palabras se hacen permisivas y dañan la ingenua tolerancia de los que las oyen.
-Que siempre existe un lado humano y racional con el que explicar lo acaecido. No obstante, no siempre es suficiente.
-Que la facilidad con la que algo es otorgado es directamente proporcional a la facilidad con la que es arrebatado.
-Que son 48.351.532 las vidas que viven día a día a su entera disposición.
-Que usted, al igual que yo, también es ciudadano.

Un cordial saludo desde el campus.

viernes, 11 de febrero de 2011

Note to God



If i wrote a note to God.....
I would speak what's in my soul, i'd ask for all the hate to be swept away and for love to over flow.

If i wrote a note to God.....
I'd pour my heart out on each page, i'd ask for war to end and for peace to mend this world....I'd say, i'd say....

Give us the strength to make it through, help us find love 'cause love is overdue and it looks like we haven't got a clue. Need some help from you. Grant us the faith to carry on, give us hope when it seems all hope is gone 'cause it seems like so much is going wrong on this road we're on.....

.....If i wrote a note to God.

domingo, 30 de enero de 2011

Otra perspectiva



Tocó el océano con la yema de sus dedos y desde la superficie pudo ver la más cristalina de las profundidades: arena ahogada en cantidades desorbitadas de agua escandalosa.

Alzó el dedo índice y dibujó estrellas en el firmamento: la flor de lis que años antes le había regalado.

Se sentó en mitad de la nada y respiró el aire limpio de intranquilidad: calma libre de ansiedad.

Besó la tierra que yacía bajo sus pies: cuna y madre de todos sus despertares.

Miró hacia arriba con la boca abierta mientras el cielo lloraba: agua de vida y fuente de inspiración.

Se revolcó en la arena que le arañaba la piel: harina de hiel y fragmentos deshechos.

Está viviendo, pero no lo hace como tú y yo: urbanitas de la muchedumbre y corderos del mismo rebaño.

sábado, 29 de enero de 2011

¿Por qué sigues todavía aquí?



Hasta aquí los pequeños pasos y las pésimas decisiones. Hasta aquí la incesante osadía de la ignorancia. Ni siquiera me conoces, ni siquiera sabes quien soy, ¿cómo puedes prometerme verdades que dañan mi sentido de lo absurdo y mi estúpida capacidad de hacer siempre lo correcto?
Ni siquiera has compartido conmigo una insignificante cena, y aún así te acercas, me desarmas, violas mi inocencia, y tal vez, después de saciarte, quieras más.
Alguien tiene que advertirte, que mis palabras pueden ser robadas, mis historias inventadas, que no hay nada más allá de la piel que te erice la misma y que, quizás, después de escalar en el tiempo para alcanzar lo que probablemente sea un punto muerto, te preguntarás por qué y no habrá ningún argumento que pese más que tu propio cuerpo y todo habrá acabado.
Alguien tiene que decirte que no soy de fiar, que me tambaleo y pierdo el control, no sé lo que digo o lo que hago y todo ello parece ser consecuencia de un profundo e irreversible desequilibrio que aturde tu perspectiva sobre mí, tu visión de todo lo mío y mi reacción ante todo lo tuyo. Soy disperso y tontamente irracional, no mantengo promesas que hice veinte minutos antes pues las olvidé. Tal vez asimile conceptos después de ti pues mi fundamento se basa en la instintiva corazonada de todo aquello que desmonta mi precioso caos, no respiro silenciosamente ni me levanto así por las mañanas, no dispongo de red de seguridad que me ayude a amortiguar la caída, he perdido mis defensas, las palabras me magullan fácilmente y las acciones pueden ser letales. No sé lo que quiero, pero sí lo que no quiero. Hago continuamente eco de mis lamentos vistiéndolos de la terquedad más insoportable. Describo exageradas percepciones de tu afecto por otras personas y las anulo antes de hacerlas estrictamente lógicas a mi cabeza y realmente manifiestas al oído.......


¿Por qué sigues todavía aquí?

lunes, 24 de enero de 2011

Reflejos



Me perdí en mitad de ninguna parte, donde la arena araña si se posa en la cara y el viento suaviza los pensamientos más puramente homicidas. Creí que llegado a tal punto ya no se haría palpable la humedad en el ambiente y mis manos recuperarían el sentido del tacto, pero no fue así: el calor era denso y extremadamente asfixiante, y el verde nunca me había parecido tan ostentoso.
Supe de inmediato que tenía que buscar una salida pues no iba a soportar la situación por mucho más tiempo. Comencé a dar tumbos en busca de respuestas, algo que me orientara, que me dijera como salir de allí. De repente, los ruidos se disiparon y avisté un pequeño lago de una transparencia impoluta que reflejaba mi cuerpo a perfectas pinceladas. Era yo, tal cual, enredado en aventuras de infinito desenlace, sumergido en anécdotas que no interesan a nadie y afiliado a mí sin más opción que el conformismo absoluto.
¿Ser o mirar? ¿Ser o durar? ¿Simplemente ser? Demasiados interrogantes y ni una sola respuesta.
Tras varios minutos contemplando mi imagen reflejada en el agua me percaté de que seguiría allí hasta que me fuera, ¡zorra descarada!....Decidí hacer lo que mejor sabía hacer: sentarme frente a mí, intuirme, definirme en lo más sórdidamente onírico y aburrirme de mi perfecta imperfección.

domingo, 23 de enero de 2011

0:00



Ring, ring, ring, ring.....

-¿Sabes que justo ahora estaba pensando en ti?

-He estado pensando.....¿Y si muero sola?

-¿Por qué ibas a morir sola? Tienes veintiséis años y eres muy atractiva, ¿quién no iba a desearte?

-¿Tú no tienes miedo a morir solo?

-No, a fin de cuentas todos moriremos solos. Tengo miedo a otras cosas.

-¿A qué cosas?

-A haber malgastado mi vida pensando en todo lo que podría cambiar en vez de vivirla sin cuestionarme tanto las cosas, acabaría matándome la idea de haber dejado pasar el tiempo sin que contase cada segundo.

-Reflexiones de las 0:04.....

-¿Por qué no te vas un poco al cuerno? Te estoy hablando de cosas serias.

-¿Qué hay más serio que después de 4 años seas incapaz de decirlo?

-¿De decir el qué?

-¿Sabes? Creo que voy a cambiar mi especialidad a económicas, así mi madre cambiaría de argumentos para criticarme en las cenas de Navidad.

-¿Qué llevas puesto en este momento?

-.....una camiseta blanca de mangas cortas, unos shorts de tela gris y....

-Vas descalza, ¿a qué sí?

-¡Confíésalo!

-Hmm......Dime, ¿vas descalza?

-Sí, ¿y tú?

-Te quiero.

-Sólo has tardado cuatro años en decirlo.

-No es la respuesta que esperaba.....

-Precisamente fue eso lo que te enamoró de mí.

-¿Era tan evidente?

-Un poco predecible quizás.....Debería irme, mañana tengo un examen final.

-Está bien. Buenas noches.

-Oye.....

-¿Qué?

-Te quiero.

-¿Dónde te gustaría ir después del examen?

-Grecia.

-Mañana estarás allí.

-¿Me lo merezco?

-¿Y yo?

-Mañana lo sabrás.

-Jamás lo sabré, ¿desayunamos juntos?

-¿Dormimos juntos?

-Ya lo hemos hecho muchas otras veces.

-Esta vez será distinto

........................................................

Una historia importante



Mi orgullo provocó mi caída, y la integridad de la que tanto me jactaba fue a parar a tu arrogancia.

---------------------------------

¿Con cuánta gente te has topado a lo largo del camino? ¿Cuántas historias? ¿Cuántas compañías? Lo que ahora necesitas es una historia importante. ¿Cómo se define el amor si no es en términos de locura transitoria y enrevesada que aturde la lógica del que ama y el mundo del que es amado? ¿Qué hace que sea distinto? ¿Qué marca la diferencia entre lo obsoleto, lo sucedáneo y lo auténtico?
Sabes que deberías detenerte un instante y mirar a tu alrededor, percatarte de todo lo verdadero y abrir esa puerta; vencer el miedo y la culpa y aceptar la necesidad de pertenecer a alguien, de ser alguien para alguien y un alguien para el resto. Si no te condicionas, si no te limitas, si llevas contigo ese lastre, únicamente si lo haces así, sabrás como duele, como escuece, como pesa el cuerpo, como quema por dentro y hiela por fuera; como se hace gélido el intento de respirar en la ausencia y como se deteriora la pasión que originariamente fue soberbia.
Sabes que podrías dar mucho más, que hay obstáculos que te superan, que eres incapaz de superar esas barreras, y aún así, eres tan escrupulosamente estúpido que te revuelcas en la miseria y le haces la cama a la desdichada conciencia sin criterio ni coherencia. Te apetece sufrir sin sufrir, necesitas amar sin sufrir....Pues te diré algo: amar es sufrir, es caer, es romper con lo establecido, compartir más que un momento, jugar sin saber como acabará la partida, afrontar consecuencias, definir lo imperfecto, moldear lo rutinario y hacerlo nuevo, perseguir ese deseo, devolvérselo al viento cuando haya caducado, saquear los temores para dejar sitio a los venideros, echarle sal a las heridas, sentarte al borde de su piel, dar vueltas sin parar, vivir para contarlo.
Si no aceptas esto, no puedes anhelar un amor que el tiempo respete y perdure, pues nada es para siempre a no ser que siempre forme parte de tu presente. Así pues, vete a dormir, que mañana amor será noción de otros parámetros que volverán a hacerse férreos tal vez en treinta años.

jueves, 20 de enero de 2011

Esto es todo






Sevilla, 20 de enero del 2011.

Yo, aprendiz de la decepción y caballero de la indecisión, juro ante vender mi alma o perder mi integridad no volver a ignorar las voces que divagan en mis mareas ni tampoco confiar en ellas, no arriesgarlo todo a una sola carta ni tampoco jugar con demasiadas, no perder el rumbo cuando el equilibrio natural depende de mi condición humana, no consentir pensamientos de carácter certero ni perderme en palabras ni gestos lascivos que arremeten contra la estabilidad de dichos pensamientos, no prejuzgar, y antes de juzgar, dar rienda suelta a mis instintos; no devenir ni dejar de ir, ni permanecer, ni volver a ir, ni querer ir cuando no debo, ni deber hacerlo cuando no es necesario, ni hacer de lo necesario una obligación, ni obligarme a mí mismo a necesitar hacerlo; no argumentar falsas premisas de una lógica incandescente, no jurar en vano, ni prometer en silencio, ni decirlo en voz alta, ni gritarlo para mis adentros; no retomar lo que el pasado me escribió como obsoleto, no divertir lo tedioso ni asegurar lo incierto, no afianzar una estabilidad basada en la mera necesidad animal ni sofocar dicha necesidad con argumentos que tienden a ser estables, no aventurarme a lo desconocido ni dejar de pensar en ello ni un minuto, no seguir adelante sin mirar atrás ni volver hacia atrás sin tener presente lo que viene en adelante, no forzar situaciones que fueron diseñadas para dejarlas fluir, no atesorar recuerdos por la abstracta vanidad de la melancolía, no romper mi alma por defecto de quien no sabe llorar, no llorar sin antes haber reído ni reir sin antes haberme lamentado, no caminar solo nunca más ni tener miedo a volver a hacerlo, no alcanzar nuevas cotas de inseguridad, no dibujar falsas expectativas de lo que en principio no deja de ser una sombra igual que todas las demás, no acelerar el ritmo si no pienso detenerme en algún momento ni detenerme sin jamás haber acelerado, no sobrevivir a lo que inventé por miedo a hacerlo real ni hacer real todo aquello que en consciencia inventé, no dejar de ser un niño para conventirme en hombre ni dejar de ser un hombre para complacer a los animales que arrasan con el criterio, la lógica y la fe. No cumplir ninguna promesa citada anteriormente pues mañana no las recordaré.

--------------------------------

Resulta esencial todo lo efímero e inútilmente prescindible aquello que nos ata.

miércoles, 19 de enero de 2011

Desde el backstage




Todos son actores: interpretan la efímera existencia dando matices de euforia y nostalgia a sus días, remueven los recuerdos y trituran las emociones, las machacan, las caducan. Creacionistas de la evolución humana, defensores de la condición animal, socialistas utópicos que nacen, crecen, se reproducen y mueren en el backstage de una obra que, aún siendo interpretada continuamente, nunca ha sido aplaudida, ni admirada, ni siquiera criticada pues nunca llega a ser vista tras el telón ni representada.

Todos tienen un guión: ensayan cada ápice, cada fracaso, cada instante de humanidad. No juegan al azar, ni saltan sin mirar abajo, por el contrario forman parte de un plan trazado que consiste únicamente en contar los pasos y perderse alguna vez en mitad del camino.

Todos saben llorar, todos saben reír. Todos hacen del estar un derecho, y aquellos que pierden dicho derecho, se obligan a sí mismos a partir donde nadie sabe de que se forman las ideas ni a donde se aleja la integridad.

Todos son actores, y todos merecen el Óscar.

viernes, 14 de enero de 2011

Tiempo



Tiempo. Ellos dicen que el tiempo es crucial en la partida. Al parecer, éste es el único que juega con ventaja pues corre, se escapa, se congela, se mueve, atrás, hacia delante, presente, pasado, futuro. Arrasa con lo que deja a su paso y no tiene compasión con todo aquello que se pudre, se deteriora, se hace basto y tedioso y lo mata la agonía de verlo pasar, la tristeza arrolladora de hacer frente a las horas y la incansable necesidad de intentar hacerlo girar atrás, como si tiraras un dado en mitad de un tablero y el destino de las fichas acabara de escribirse con tinta imborrable, férrea, de acero macizo y piedra caliza.
Lunes, martes, miércoles, jueves.....Enero, febrero, marzo.....Cuando llegues al doce vuelve a empezar. El tiempo se empeña en repetir los días, uno tras otro, indagando en el profano aburrimiento de todo lo imaginativamente sacro incumplido, y después de hundirte en el lodo, de atiborrarte de falsas esperanzas y minutos caducados de tiempo incesante, sigue caminando, y camina, y camina y morirás sin verlo pararse un instante a los ojos de la realidad.

Hay situaciones que paran el tiempo....Ellos dicen que cosas tan divagantes como el amor y sustancias tan vigorosas como la saliva de un beso detienen el tiempo, ipso facto, y aceleran el pulso, como si dos cuerpos convergieran en un mismo punto en el espacio y se congelasen mientras los demás continúan paseando por el umbral de la estupidez peyorativa, escalando el tiempo.

Ese que cura las heridas y vuela hasta el infinito, regresa, se burla de tus días y vuelve al infinito, puede hacer de tu vida la más insoportable de las levedades o la más fugaz de las tormentas. Todo lo que cada ser humano necesita es algo más de tiempo. Tiempo para caer, tiempo para levantarse, tiempo para crecer, tiempo para madurar, tiempo para malgastar y dejarlo ir. Tiempo.

lunes, 10 de enero de 2011

Lo que busco....Lo que quiero



Llévame a casa cuando me emborrache. Rómpeme la camiseta con los dientes y cómprame otra luego. Piérdete a mi lado y rescátame después. Disfraza mis días grises y dales algo de color. No te enfades si no me entiendes, a veces ni yo lo hago. Sácame la lengua cuando me ponga tonto. No des por hecho que voy a estar siempre a tu lado, pero no lo dudes ni un segundo. Hazme sufrir, y luego busca la forma de remediarlo. No me mientas. No me vendas amor eterno manoseado. No me compres con regalos, pero ten mil detalles escritos en papel. Hazme reír hasta cuando esté sollozando. Conóceme de nuevo de vez en cuando. Mírame y hazme temblar. Vuélvete loco por mí y mátame a besos por las mañanas. Mira a otros por la calle y, luego, guíñame el ojo y ríete de mis celos de hojalata.

domingo, 9 de enero de 2011

Nothing. No one. Nowhere. Nohow.



Nothing that supports my ideas.
Nothing that creates a brand new way of life.
Nothing that makes me keep on touching the ground, nor flying away or tripping around.
Nothing that helps me to believe in every single moment.
Nothing that links me to whatever is mystic and supernatural.
Nothing that i got to do.

No one in my life.
No one who stands by my side.
No one who really cares about me.
No one who defines my sense of being adored.
No one who wants to share those stuff that i've been reaching for.
No one who i can meet.

Nowhere to run to.
Nowhere to fill the space between my emotions and the reality.
Nowhere to face the fear of the middle place between the light and nowhere.
Nowhere to fall in love.
Nowhere to take by storm and stomp those roads that i've been crossing around.
Nowhere i should go.

Nohow to make it real.
Nohow to keep on dreaming of.
Nohow to fulfill all those goals that i've been trying for.
Nohow to breathe in and breathe out.
Nohow to take good care of a situation to deal with.
Nohow i should stop.

jueves, 6 de enero de 2011

Tan importante



Podría escribir un tratado sobre la hipocresía o podría defender la falacia de sus palabras y comprender entonces que todo cuanto dijo no fue premeditado, no lo diseñó, ni siquiera lo pensó levemente antes de romperlo en el aire. La ilusión me vistió esa tarde: todo cuanto había imaginado en el rincón más apartado y marginal de mi mente soñadora estaba ocurriendo, era producto de la realidad y no un sueño más de caminos de horas absurdos hacia la nada. Me hizo sentirme vivo, me hizo creer en lo increíble y hacer de lo creíble algo surrealista. No pude contar el tiempo, no pude seguir su ritmo, pues encabezó una carrera cual meta invisible llevaba las horas a ninguna parte. Ni siquiera dolió, no le dio la oportunidad de que doliese, ni de que fuese leve, ni de que existiera, tan sólo de que ocurriera. Y después de tanto tiempo, sigo aquí clavado escribiendo palabras que tal vez no sean leídas, depositando en blanco pensamientos que tal vez no sean compartidos, malgastando minutos que tal vez no sean devueltos, y si sólo tal vez, existe la posibilidad de su regreso, ¿por qué me anula tanto estar escribiéndolo?
No existe ficción si no se sube el telón, ni existe fracaso si las heridas no escuecen. No dudo de lo que fue, pero tampoco sé con certeza lo que será, ahora bien, seamos esclavos de ese momento porque no hubo lugar para falsas premisas ni escenas de balcón, ni siquiera para miradas equívocas.
No puedo presumir de paciencia pues aquella misma me exalta los nervios y nubla mis sentidos, pero aquí sigo clavado, sin aburrirme, sin desesperarme, haciendo de la necesidad virtud y separando con comas lo que no quiero que aún sea borrado. Y créeme, sigo siendo igual de transparente que siempre, y créeme, la última playa sigue estando en esos ojos.